Ha pasado un mes, ya la vida se ha hecho una rutina de trabajo incansable. Nunca me habia fijado en lo duro q era la vida del campesino, kiciera poder ayudarlos. Pero, como? No puedo hacer nada fuera del castillo. Oh, el castillo, mi nana, nunca pense en decir esto, pero, extra~o el castillo, y muy en especial a mi nana.
Marysol ya ha depositado un poco de su confianza en mi. Ya no me rega~a por salir hacia las afueras de la "granja". De hecho, ella es kien me lleva a ver la peke~a aldea dentro de este poblado, a veces nos adentramos en el bosque para cazar. Esta vida es pacifica, sin problemas, sin batallas. *suspiro* Y Marysol es tan dulce, tan cari~osa, no se q me esta pasando. En fin, hoy dijo en la ma~nana q me llevaria a un lugar del cual nadie sabe, dice q lo descubrio cuando era una peke de 10 a~nos.
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Marysol: Aqui es.
wow... Nunca habia visto un lugar como este. Era un pedazo del bosque encantado, de fantasias. Algo se movia entre los arbustos en la lejania, no puedo creer lo q veo. Son unicornios! Me habian contado de ellos cuando era un ni~no pero jamas pense q existian.
Yo: Esto es increible Marysol.
Marysol: Q bien q te haya gustado. Sabes? Nunca habia traido a nadie a este lugar. Tu eres al primero al q le ense~no este peke~no paraiso.
Ella me sonreia. Q hermosa sonrisa tiene. No puedo aguantar las ganas de acercarme hacia ella. Q me pasa? Me le acerco, rodeo su cintura con mis manos, ella parece coresponder el gesto. Acerco mi rostro al suyo y simplemente le beso los labios. Solo un simple beso, nada mas. Ella me rodea el cuello con sus diminutas manos y acerca mi rostro al suyo para volver a juntar nuestros labios y asi poder moverlos al mismo tiempo, sincronisadamente. Sentia q se detenia el tiempo, q este beso duraba para siempre. "TE AMO" escuche q decia el viento q nos arropaba en su arrullo. Miro sus ojos y... despierto. *suspiro* Solo ha sido un sue~no. Abro mis ojos y veo su peke~no rostro frente al mio.
Buenos dias-me saluda ella.
Rosando su rostro con mi mano le digo: Buenos dias...
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